CASTAÑAS DE CAJÚ: INVERSIÓN QUE REDITÚA

23/08/2021

Al igual que todos los frutos secos, la castaña de cajú es un alimento concentrado en grasas saludables, proteínas, vitaminas y minerales. La presencia de grasas poliinsaturadas promueve la formación de colesterol HDL, también llamado “colesterol bueno”, que se encarga de reducir el colesterol LDL y promover la salud vascular. 

Las castañas de cajú proveen el 67 % de las necesidades diarias de cobre, mineral esencial para la producción de energía, el desempeño del cerebro y para fortalecer el sistema inmune. Además, contienen un pigmento antioxidante llamado zeaxantina, que protege a la planta de la radiación solar; esta misma función cumple en la retina humana, protegiendo los ojos de las radiaciones ultravioleta del sol, y así previniendo la degeneración macular.

Por último, cabe destacar que las castañas de cajú son un excelente alimento para quienes sufren de diabetes tipo 2. Su consumo cotidiano ayuda a reducir los niveles de insulina en sangre. El alto contenido de fibra y bajo en azúcar hace de las castañas de cajú un alimento ideal para reducir los valores de glucemia y prevenir el desarrollo de diabetes tipo 2.

Cabe destacar que, además de que las castañas de cajú contienen múltiples beneficios para nuestra salud, son muy fáciles de incluir en nuestra alimentación ya que su sabor neutro y sutil las hace propicias para agregar cremosidad o crocancia tanto a platos dulces como a salados. Te invitamos a que pruebes esta deliciosa salsa y que la uses para acompañar tus platos preferidos. 

Puedes encontrar esta receta y muchas más en el recetario Sano y sabroso: Recetas fáciles para lucirse.


Salsa cremosa de castañas

Ingredientes:

  • 1 taza de castañas de cajú sin tostar y sin sal.
  • ½ taza de semillas de girasol pelado sin tostar.
  • 2 cdtas. de ajo en polvo.
  • 2 cdtas. de cebolla en polvo.
  • 1 cdta. de orégano seco.
  • 1 cdta. de romero seco.
  • 1 cdta. de salvia seca.
  • Jugo de 1 limón.
  • 3 a 6 cdas. de agua.
  • Sal a gusto.

Preparación:

  1. Remojar las castañas y el girasol (pueden ser solo castañas) en 3 tazas de agua hirviendo. Dejar reposar hasta que se entibien, colar y transferir a la licuadora con todos los demás ingredientes.
  2. Triturar hasta lograr una crema muy lisa; agregar más agua, si hace falta. Puede utilizarse así o transferirse a una cacerola pequeña y cocinarla hasta que hierva (se hará más espesa).
  3. Servir sobre papas bandoneón, pastas, arroz o vegetales al vapor.

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